En medio de toda la algarabía y el entusiasmo que genera todo este festín, es necesario no dejarse llevar por la euforia ni creerse que el mundo se está acabando. En cambio, conviene tomarse las cosas con calma para no cometer excesos con la alimentación, que perjudiquen al organismo. Seguir Leyendo...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario