Por José Helena
En momentos en que el país del merengue se levanta después de dos tormentas; Noel y Olga, el mundo político dominicano se da a la tarea de emitir opiniones sobre sí era prudente desaguar la presa o no, culpando a personas que desde hace tiempo manejan dichos sistemas.
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Debe recordarse que la naturaleza es impredecible e incontrolable y ningún pensamiento humano sería capaz de cometer tan sanguinaria acción.
Por otro lado, el asunto del presupuesto, funcionarios cuestionándose públicamente unos con otros sobre las partidas asignadas, algunos llamando “payaso” al secretario de Hacienda, Vicente Bengoa; al extremo, el DEPRECO, que da unas declaraciones donde califica de poco fructífera su labor, debido al manejo que da la justicia a determinados expedientes de corrupción... ¿anhh y entónces, qué hacemos como la corrupción?
Sin mencionar la asignación de casi unos mil millones de pesos a organizaciones no gubernamentales (ONG), que en la mayoría de las veces son barrilitos sin fondos, que no resuelven nada, estas deben ser revisadas. Por ejemplo, Profamilia, que su labor debe ser resaltada, en el país hay un alto porcentaje de niñas embarazadas que hay que revisar; Hogar Crea, con una gran labor en favor de los adictos, es subestimado por las autoridades, señores mantengamos la altura.!
Lo prudente sería que los interesados en discutir lo concerniente a su presupuesto lo hagan personalmente con el presidente Leonel Fernández y/o el jefe de Hacienda, Vicente Bengoa.
Otros, ni siquiera piensan en discusión, pues son de los que opinan que, la solución es trabajar con los más desposeídos sin importar lo que el gobierno pueda ofrecer, como era el caso del hogar de “Doña Chucha” que en ocasiones trabajó bajo precariedades sin esperar ayuda Estatal, que ejemplo el de María de las Nieves Sierra ”Doña Chucha” que la obra de esa mujer sirva para que los funcionarios, partidos e instituciones centralizadas y descentralizadas trabajen más y griten menos.
¡Mantengamos la ALTURA!
En momentos en que el país del merengue se levanta después de dos tormentas; Noel y Olga, el mundo político dominicano se da a la tarea de emitir opiniones sobre sí era prudente desaguar la presa o no, culpando a personas que desde hace tiempo manejan dichos sistemas.
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Debe recordarse que la naturaleza es impredecible e incontrolable y ningún pensamiento humano sería capaz de cometer tan sanguinaria acción.
Por otro lado, el asunto del presupuesto, funcionarios cuestionándose públicamente unos con otros sobre las partidas asignadas, algunos llamando “payaso” al secretario de Hacienda, Vicente Bengoa; al extremo, el DEPRECO, que da unas declaraciones donde califica de poco fructífera su labor, debido al manejo que da la justicia a determinados expedientes de corrupción... ¿anhh y entónces, qué hacemos como la corrupción?
Sin mencionar la asignación de casi unos mil millones de pesos a organizaciones no gubernamentales (ONG), que en la mayoría de las veces son barrilitos sin fondos, que no resuelven nada, estas deben ser revisadas. Por ejemplo, Profamilia, que su labor debe ser resaltada, en el país hay un alto porcentaje de niñas embarazadas que hay que revisar; Hogar Crea, con una gran labor en favor de los adictos, es subestimado por las autoridades, señores mantengamos la altura.!
Lo prudente sería que los interesados en discutir lo concerniente a su presupuesto lo hagan personalmente con el presidente Leonel Fernández y/o el jefe de Hacienda, Vicente Bengoa.
Otros, ni siquiera piensan en discusión, pues son de los que opinan que, la solución es trabajar con los más desposeídos sin importar lo que el gobierno pueda ofrecer, como era el caso del hogar de “Doña Chucha” que en ocasiones trabajó bajo precariedades sin esperar ayuda Estatal, que ejemplo el de María de las Nieves Sierra ”Doña Chucha” que la obra de esa mujer sirva para que los funcionarios, partidos e instituciones centralizadas y descentralizadas trabajen más y griten menos.
¡Mantengamos la ALTURA!
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